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Taladrinas

Las industrias del sector metalúrgico son una de las principales consumidoras de aceites industriales, que emplean como fluidos que facilitan la lubricación y refrigeración en algunas de sus operaciones más frecuentes, como en la modalidad de corte, moldeado y tratamiento mecánico de metales. El principal ejemplo de este tipo de utilización del aceite industrial son las denominadas taladrinas.

(24) Taladrinas (INDUSTRIA). Qué son las taladrinas.

¿Qué son las taladrinas?

Las taladrinas son emulsiones de aceite y agua. Esta emulsión tiene una concentración variable con valores próximos al 5% de aceite y el 95% de agua, en función de los diferentes usos. Es un producto empleado mayoritariamente en la industria del mecanizado metálico por sus propiedades lubricantes y refrigerantes en los procesos donde existe un contacto directo entre la pieza que se moldea o transforma y la herramienta utilizada para ello.

La taladrina optimiza las condiciones físico-químicas de la zona de contacto entre metales reduciendo la fricción y, con ello, facilitando el acabado de la superficie metálica y alargando la vida útil de la herramienta. Además la taladrina previene el sobrecalentamiento de las piezas y la maquinaria, evacúa la viruta resultante y evita el óxido.

Las taladrinas y otros aceites utilizados como fluidos de corte son aceites industriales y sus fabricantes/importadores están obligados a gestionar individualmente los aceites usados o a participar para ello en un SIG, gravando el producto con su aportación económica. Como consecuencia, la recogida y gestión de los aceites usados resultantes, tales como taladrinas usadas o agotadas, lodos de mecanizado, residuos de desengrase, aguas aceitosas, etc. está amparada por el sistema SIGAUS.

(24) Taladrinas (INDUSTRIA). Qué ocurre con las taladrinas usadas.

¿Qué ocurre con las taladrinas usadas?

Con su utilización y el estrés mecánico al que se someten, las propiedades de las taladrinas van desapareciendo, reduciéndose su rendimiento y contaminándose el producto con agentes externos, tales como aceites y grasas, partículas sólidas metálicas, microorganismos, polvo ambiental, etc. Esta combinación de agentes externos, unidos a los componentes propios de la taladrina, convierten a estos productos, una vez que se encuentran agotados, en residuos altamente contaminantes, tanto para el medio ambiente como para los propios operarios que las manejan. Las taladrinas usadas o agotadas pueden contener metales pesados, biocidas, gérmenes nocivos y sustancias en descomposición, nitrosaminas, compuestos de boro, etc., por lo que están consideradas como residuo peligroso por la normativa europea y española.

La normativa vigente obliga a la industria a gestionar este residuo. Al tratarse de un aceite usado “fuera de especificaciones”, por su porcentaje de agua y sedimentos, su tratamiento supone un proceso complejo y muy costoso, por lo que no puede recogerse en condiciones de gratuidad. Deben pasar por un pretratamiento de la emulsión antes de poder gestionar el aceite a través de la planta de tratamiento. Para separar la fracción oleosa de la fracción acuosa, hay distintos sistemas fisicoquímicos que pueden aplicar las distintas plantas de tratamiento fisicoquímico. La fracción oleosa que se separa es la que se lleva a gestionar.

A través de SIGAUS se financia la gestión de la parte oleosa de las taladrinas, aunque el residuo se entregue sin haber sido separado. Por su parte, los gestores que mantienen un contrato con el SIG deben deducir de los costes de recogida 12 € por cada tonelada de aceite neto dentro del residuo gestionado.

(24) Esquema flujos económicos taladrinas. INDUSTRIA

11 - pie taladrinas

El aceite usado en España

Ribadeo. Galicia.
Monumento Natural de la Playa de las Catedrales. Reserva de la Biosfera. Zona Ramsar de protección de las aves. Más de 20.000 kg de aceites usados recogidos y gestionados en este municipio gallego.