De acuerdo a la normativa que regula la gestión de los aceites usados, las empresas que fabrican y comercializan los aceites lubricantes son las responsables de financiar la correcta gestión de los residuos que se generan cuando estos productos llegan al final de su vida útil. Dado que, por las características de este residuo, no es posible establecer una conexión entre los aceites usados y los fabricantes que han comercializado los aceites industriales, SIGAUS encarga anualmente estudios de mercado independientes que permiten identificar la estructura del mercado y definir la cuota que representan sus empresas adheridas.

Según el estudio realizado por la consultora PwC al inicio de 2024 sobre datos de 2023, la cuota de representación de las empresas adheridas a SIGAUS es muy similar a la del estudio anterior, con una reducción de 0,13 puntos porcentuales, situándose en un 86,01%. En cuanto al mercado total, presenta una tendencia ligeramente alcista, con 438.927 t, lo que supone un incremento del 1,5% con respecto a 2022, aunque un 3,7% por debajo del nivel prepandemia (2019, cuando el mercado llegó a las 455.861 t).

Tras descontar las grasas, aceites marinos sujetos al Convenio MARPOL y de proceso, excluidos de la aplicación de la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), la cantidad de aceites lubricantes sometidos a RAP en 2023 fue de 354.010 toneladas, según este estudio. Descontando, a su vez, los aceites industriales destinados al mercado fuera de España –fundamentalmente en vehículos cuyo primer llenado se realiza en España y que posteriormente son exportados– el total de aceites industriales comercializados en España y sometidos a RAP fue de 334.453 t, una cifra muy similar a la de 2022 (335.170 t).